Museo arte moderno . Medellín
origen: Izaskun Chinchilla
Esta memoria trata de ser breve y completa, comprensible y técnicamente precisa. Es mucho lo pensado y son grandes los retos que enfrentamos y, sin embargo, breves los tiempos para tomar decisiones. En aras de lograr que la claridad y la concisión no eludan las aspiraciones integrales que perseguimos, hemos dividido esta memoria en tres apartados, tratando de que cada uno de ellos explique la propuesta desde un punto de vista distinto. En cada apartado hemos redactado un pequeño preámbulo al que, después, hemos acompañado de una serie de lemas: frases o párrafos sintéticos que trazan argumentos de desarrollo para la trasformación de estos dibujos en una mágica realidad y para su explicación, a quien pueda interesar.
REFERENCIAS CONCEPTUALES.
¿Por qué hemos construido los planos de una Nube?: Una vez Foucault habló sobre Magritte.
En 1968 Michel Foucault escribió un ensayo sobre René Magritte. El título hacia un homenaje expreso a una emblemática obra del pintor: “Ceci n’est pas une pipe”. Habría que confesar que este ha sido el libro de cabecera, durante unas semanas, del equipo redactor de este proyecto. ¿Por qué?, la respuesta es sencilla: el libro dedica un gran esfuerzo a analizar la inteligibilidad de las piezas de arte contemporáneo y ese era, precisamente, el mayor de nuestros desvelos desde comienzo del trabajo. Podríamos hacer un edificio hermoso, valorado por los arquitectos, un edificio funcional valorado por los gerentes o un edificio significativo valorado por la Alcaldía pero ninguno de estos logros garantizaban el objetivo fundamental: sensibilizar a un número importante de personas, sin predisposición previa, hacia el disfrute y la valoración del arte contemporáneo. ¿Cómo conseguir que los adolescentes tengan ganas de ver arte después de clase?, ¿cómo garantizar que los trabajadores de las industrias que todavía se ubican en barrios colindantes se sientan bienvenidos en la hora del almuerzo?, ¿cómo eludir la percepción elitista y especializada que del arte contemporáneo tiene la ciudadanía?. Secretamente, el libro de Magritte habla de ello.
Foucault defiende que en cualquiera de los vericuetos que empuja a un artista a una creación intervienen dos elementos fundamentales: los objetos y las palabras. Aunque después no queden en el lienzo, la escultura o el video, el artista ha necesitado palabras y objetos para planificar su acción. La abstracción en el arte contemporáneo ha provocado que, prácticamente siempre, esas palabras y esos objetos que alumbraron la creación desaparezcan en el soporte definitivo. Se separan así dos argumentos, que hasta el siglo XX habían tenido siempre una estrecha relación: la interpretación de los hechos, de lo que vemos, de lo que está delante y el relato creativo del mismo, el que describe el proceso de ideación. Esta separación hace que para muchos el arte contemporáneo carezca de sentido, sea hermético o, incluso, roce a veces lo ridículo. Según Foulcault, Magritte propone una nueva alianza entre las desvencijadas hipótesis de la interpretación: acorrala a la cosa con la palabra, lanza dos mensajes paralelos, insiste en los planos de interpretación y en sus relaciones. Pero también obliga al espectador a pensar. Si el caligrama dice lo mismo con la imagen que con la palabra, Magrittte lo deshace e introduce una relación no literal que obliga al espectador a conectar, en su mente, de nuevo, la palabra y la imagen que se le han presentado juntas.
Esta era una de las determinaciones que teníamos en el diseño: nuestro museo pondrá en boca del espectador un nombre, recuperará la palabra y facilitará un encuentro entre signos reconocibles y símbolos coincidentes. Cualquiera que lo vea dirá que es una nube, rechoncha, misteriosa y de aspecto decididamente blando. Verá la nube recortada sobre el cielo, como en cualquier hermoso paisaje, pero sabrá que solo la magia de la creación humana ha permitido generar esta belleza, excepcional, atípica y que parece desafiar lo posible. El edificio proporciona a la institución una imagen accesible, comprensible, significativa, divertida, desenfada y vinculada al ejercicio de la creatividad humana. Todo ello sin detrimento alguno de las prioridades de arquitectos, alcaldes y gerentes, a los que, como explicaremos en otros apartados de la memoria, dejaremos convenientemente satisfechos pero sin olvidar, tampoco, que el gran destinatario de este espacio es un público reacio a comprender su necesidad y su interés.
Nuestros lemas en lo conceptual:
HAY QUE ROMANTIZAR EL MUNDO (lo confesamos, este lo hemos tomado prestado, lo dijo Friedrich von Hardenberg (1772-1801) pero lo que importa es lo que sigue): tenemos que “convertir lo misterioso en cotidiano y lo cotidiano en sublime”.
PARA LA ARQUITECTURA DEL MAMM CONECTE CON LA CIUDADANÍA PAISA DEBEMOS CONSTRUIR LA FIGURACIÓN DE NUESTRO TIEMPO Y DE NUESTRAS INSTITUCIONES: Nuestro edificio no abstracto pretende ser el rostro amigo que permite a todos reconocer a las personas y su tiempo. Se vincula con la publicidad, con los comics, con los osos de peluche, con el videoarte y con lo que sucede en internet.
LA VOCACIÓN CULTURAL Y PÚBLICA EXIGE QUE EL EDIFICIO SEA, ADEMÁS, UN LADRILLO EN LA CONTRUCCIÓN DE IDENTIDAD DE LA CIUDAD. Aunque a los arquitectos puristas les encante criticar la arquitectura icónica y intenten achacarle millones de pecados lo cierto es que el Museo Guggemhein colocó a Bilbao en los planos del mundo y que ese beneficio es un enorme rédito social a largo plazo.
EL ARTE ES SIMPLEMENTE, VER EL MUNDO CON OTROS OJOS. Esto lo suscribe John Berger y lo aplica nuestro edificio planteando al espectador imágenes del exterior, de lo que conoce como cotidiano, deformado por lupas y teñido por colores.
UTILIZAMOS EL MITO DE LA ESCALERA HACIA EL CIELO PROCEDENTE DE VARIAS COSMOLOGÍAS INDÍGENAS DE LATINOAMÉRICA. Varias cosmologías y tradiciones culturales indígenas latinoamericanas utilizan la leyenda de la escalera al cielo para explicar los procesos de creación. En Perú se han encontrado leyendas con este argumento que explican la separación de la luna y el sol, antes una feliz pareja habitante de la tierra, como fruto de un castigo supremo consistente en hacer subir al varón al cielo por una escalera.
UNA NUBE SOBRE TALLERES ROBLEDO. Siguiendo la tradición cultural del Realismo Mágico que ha proporcionado tan insignes obras en Colombia proponemos al espectador una estampa no exenta de surrealismo: una nube parece haberse quedado obstinadamente enganchada al edificio de talleres robledo.
CONVERTIMOS EL CLIMA EN UN ARGUMENTO CULTURAL. Desde Heideger, muchos movimientos culturales han reivindicado la puesta en valor de las condiciones geográficas como aspecto configuradores de la cultura. Este proyecto trata de distinguir las condiciones geográficas de Medellín como el clima, como episodios de naturaleza cultural.
REFERENCIAS MUSEOGRÁFICAS.
Como captar al público no natural.
Si preguntásemos a cualquiera quienes son los destinatarios de un museo público parecería evidente la respuesta: toda la ciudadanía. Las estadísticas, aunque todos sabemos que puedan servir para apoyar casi cualquier argumento, no refrendan completamente esta suposición. Sin entrar en situaciones coyunturales más específicas debemos recordar que, los museos del Reino Unido, país cuya capital cuenta con una da las ofertas de museos más extensa y cualificada del mundo, reciben 110 millones de visitantes anuales y que, sin embargo, solo un 4% de la población local visita los museos, a pesar de los enormes despliegues de exposiciones temporales, más de 5 veces al año (Merriman, 2004). También hay un 20% de británicos que nunca en su vida visita un museo. Si las estadísticas que hubiésemos manejado se refiriesen específicamente a Museos de Arte Contemporáneo, los números serían más dramáticos en evidencias de cantidad y de especialización. Si no contamos con la exhuberancia museística de la ciudad de Londres y si no tenemos una cimentada afluencia turística, vuelven a reducirse significativamente las cifras.
En el mismo ámbito geográfico del Reino Unido, en el que hay muchos ejemplos de monitorización institucional, los estudios cualitativos, aquellos que tienen en cuenta la identidad del visitante, arrojan predecibles resultados: los visitantes más probables de un museo son el colectivo con mayor preparación académica (doctores y titulados universitarios) y el más desocupado (jubilados y parados), (Merriman, 2004). Aunque la tendencia es a la popularización espontánea en casi todos los países, el caso particular del arte contemporáneo sigue siendo un escollo cuya magnitud puede medirse por la drástica segmentación de clases sociales que reciben las Galerias de Arte (Schulter, 2005). Así pues si queremos que la afirmación de que los Museos públicos son para todo el mundo sea cierta tenemos mucho trabajo por hacer. La identidad arquitectónica y las posibilidades museográficas van a influir de forma determinante en las aspiraciones de la institución. El Museo Guggeheim de Bilbao ha recibido 10 millones de visitas en 10 años, número de visitantes que, antes de construirse, no era siquiera alcanzado por la cantidad de viajeros que se acercaba a una ciudad aquejada de un pasado industrial en decadencia. Exposiciones como “Bodies. El cuerpo humano como nunca lo has visto” vatió records de afluencia consiguiendo 500 visitantes en las dos primeras horas en muchas ciudades y una media de 6.000 visitantes/mes en diferentes emplazamientos. Aunque pensemos que estos logros requieren costosas inversiones esas inversiones se han hecho en otros muchos lugares sin un éxito equiparable. ¿Qué distingue a las intervenciones que superan significativamente el número de visitantes predecibles?, ¿Cómo se consigue que una exposición forme parte de los temas de conversación en trabajos y colegios?. Nuestra propuesta de edificio y filosofía museográfica aprenden las claves que las iniciativas museográficas recientes nos han proporcionado.
Una de estas claves es, sin duda, la singularización y la intensificación de la experiencia. La competencia de otros soportes, no solo los libros y revistas que ya existían, si no internet, los documentales cinematográficos, o los soportes digitales en DVD hacen que la inversión de tiempo y esfuerzo que supone la visita al museo tenga que compensarse con una experiencia “única”, que no podría reproducirse en casa o a través del ordenador. Para muchas instituciones clásicas la singularidad y la intensidad de la experiencia se apoyan en la calidad ambiental y en la presencia de las obras. El Velázquez que retrata a Inocencio X o los autorretratos de Rembrandt acompañados de la luz adecuada y un edificio histórico son sinónimo de estremecimiento asegurado. Cuando no hay un conocimiento previo de las obras, ni esa anticipación casi mítica, construir la singularidad de la experiencia e intensificar lo que su contemplación en otros medios puede suponer es un reto mucho más complejo. Otra clave fundamental es la huida de la presunción académica que envolvía a los museos del XIX y el acercamiento a realidades más integradas y comprensibles en la realidad urbana. Las medidas concretas tomadas por el equipo redactor de esta propuesta para alcanzar esos objetivos se listan a continuación, como anunciamos, en forma de lema.
UNA ARQUITECTURA ÚNICA. Creemos que Medellín merece un edificio único, que signifique y represente a la ciudad internacionalmente. Creemos que las particularidades climáticas de Medellín son diferentes a las europeas y a las norteamericanas y que la realización de edificios bunker, completamente cerrados a las favorables condiciones ambientales proceden de una aplicación acrítica de tendencias excesivamente globalizadoras. Recordamos que según los analistas “los museos tienen un papel fundamental en mejorar la comprensión de la identidad y el sentido de pertenencia a un lugar a una comunidad. Ante las duras condiciones de cambio y coyuntura socio políticas de muchos países, los museos han producido vínculos eficaces entre el pasado y el presente y han tenido un rol activador para la construcción de prometedores futuros”. (Ambrose y Paine, 1993).
TRABAJAREMOS SOBRE TODO PARA EL PÚBLICO. Sin violar los principios de la funcionalidad museográfica y de la calidad arquitectónica el objetivo que capitanea nuestro trabajo es conseguir la mayor popularidad del edificio en el público no especializado.
CON ESPECIAL ATENCIÓN A LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES. La distribución de tiempos y ocupaciones de los sectores más jóvenes de la población les convierte en candidatos adecuados a ser público de museo. La incorporación de los jóvenes garantiza un patrimonio cultural futuro, especialmente deseable para las ciudades. En muchos lugares del mundo no se consigue esa incorporación eficazmente porque los espacios museográficos tradicionales requerían de silencios y ceremonias incompatibles con la naturaleza infantil y preadolescente e difícilmente compatibles con los grupos adolescentes no monitorizados (lo que intentamos capturar son visitas espontáneas). Hemos planteado un museo muy transparente y accesible desde varios espacios públicos para que el ruido producido por los niños no impida la contemplación interior y más pausada de las obras pero tampoco evite su acercamiento. Hemos construido una nube mágica, un espacio sorprendente que incita a la exploración sensorial. Hemos incorporado las nuevas tecnologías, recurso en el que los sectores más jóvenes de la población se sienten legitimados a capitanear destrezas instrumentales e interpretativas.
PROPORCIONAMOS UNA PLATAFORMA ABIERTA PARA COMISARIOS, GERENTES Y ARTISTAS.
Nuestro edificio se compone de varios forjados horizontales de gran extensión. La estructura se ubica buscando una máxima diafaneidad del espacio. No existe una fachada única, sino un conjunto de soluciones, dispuestas en varios planos que permiten personalizar la entrada de luz, olores y ruidos a cada espacio. Esta estructura debe ser entendida como una gran plataforma, donde puede alojarse cualquier actividad. La solución técnica para los forjados consiste en la realización de cajas huecas cerradas con listones de madera en bruto con espacios huecos intercalados entre listones. Esta solución posibilita la canalización de instalaciones especiales a cualquier punto del museo sin obra húmeda y permite al comisario o artista modificar sustancialmente el espacio. Así pues proponemos un sistema de plataformas abiertas y horizontales que pueden tener diversos usos expositivos o participativos. Más que proponer un esquema típico de compartimientos o salas conectadas, proponemos suelos flexibles y conectados verticalmente que pueden dar cabida a diversos tipos de eventos en torno a la cultura: lanzamientos de libros, debates temáticos, exposición de obras de arte plástico, intervenciones, performances, fiestas musicales, etc...
UNA DE LAS PRIORIDADES DEL DISEÑO HA SIDO CONTRUIR ESPACIOS PÚBLICOS ASOCIADOS AL USO DEL EDIFICIO. En análisis de las condiciones y retos urbanísticos de la ciudad de Medellín arroja un resultado inmediato: el trabajo más urgente a realizar por la alcaldía es la mejoría de la movilidad peatonal. La ciudad presenta un déficit de espacios públicos habitables con un acceso democrático para el conjunto de la población. Es mucho lo que se ha hecho en los último años y grandes los éxitos alcanzados que pueden medirse en la popularidad de espacios como la Plaza de los Deseos o el Parque Lineal con el que estableceremos vecindad. Parece incluso que una de las fórmulas probadas de éxito para la arquitectura y el urbanismo de Medellín consiste en la asociación de cada edificio de calidad a un espacio público anexo. Reconociendo el buen criterio de esta política hemos querido prolongarla e intensificarla. Por ese motivo hemos planteado una ocupación de parcela del 42% y hemos habilitado en el 58% de superficie restante una gran plaza, con la que el edificio establece un diálogo interactivo. Además hemos dispuesto una gran cubierta museo, donde el arte se enfrenta al paisaje de las montañas de poniente y donde se pueden realizar eventos con un aforo de unas 500 personas. Por otro lado hemos ubicado un patio cubierto de árboles y semihundido, protegido del exceso de humedad y dentro de las zonas de acceso sin pago de entrada para convertirnos en un destino habitual a las horas del almuerzo, el desayuno o la merienda, captando, de nuevo, un público espontáneo e imprevisto.
LOS ESPACIOS Y RECORRIDOS MUSEOGRÁFICOS QUE SE ORGANIZAN NO SON TANTO SALAS COMO ITINERARIOS ENTRE PLATAFORMAS. La forma de boomerang de las plantas, la ubicación central de las escaleras mecánicas y la disposición de deambulatorios perimetrales generará un catálogo de espacios expositivos donde el criterio de ordenación prioritario sea el de recorrido frente al de sala. Este esquema de funcionamiento museográfico ha dado lugar a espacios muy reconocibles como el museo Guggenheim de Nueva York o el museo Judio de Berlín. Pero, fuera de que la envolvente arquitectónica rigidice o faculte el movimiento, es una de las políticas imperantes en los museos que puede constatarse en las grandes pinacotecas como el Louvre o en prestigiosos Museos de la Ciencia en todo el mundo.
POR FAVOR, DESOIGAN A LOS ACADEMICISTAS. Por todo ello les pedimos que, por favor, desoigan a los academicistas. Conocemos la tradición que dice que las paredes de los museos son blancas, para dar libertad y contraste a lo que se expone, que la luz artificial es más controlable que la natural, que el racionalismo no solo es más barato sino que es más funcional y que la arquitectura de calidad no es compatible con la metáfora. Llamamos a los representantes institucionales y públicos a reflexionar sobre si quieren destinar su inversión a carpinterías que desaparecen para generar una sensación de arquitectura limpia sabiendo que esa apariencia de racionalismo es más costosa de lo que perece, a que el arquitecto pueda dar lecciones sobre la inteligencia de la modulación en planta o a que, de verdad, consigamos hacer, entre todos, una institución formativa y que genere entusiasmo social. Todo ello no es incompatible con las últimas tendencias museográficas, que gustan más de un garage lleno de objetos inservibles que de una caja blanca con aspecto de cenotafio. Para dar muestra de ello hemos seleccionado algunos ejemplos.
DESCRIPCIONES FUNCIONALES FUNDAMENTALES.
Una parte fundamental e irrenunciable de la cultura de nuestra época, que implica un cambio de paradigma en el pensamiento contemporáneo es la cultura de la sostenibilidad. Este proyecto no trata solo de adaptar arquitecturas de otras épocas incorporando medidas paliativas si no que contempla la sostenibilidad como uno de sus principios fundacionales. Aunque la definición de sostenibilidad excede a los requerimientos de las técnicas bioclimáticas, estas técnicas pueden definirse como un compromiso básico de los edificios con su medio ambiente. Estas son algunas de las aplicaciones que la técnicas bioclimáticas han tenido en el edificio.
USAREMOS LUZ NATURAL SIEMPRE QUE SEA POSIBLE, AUNQUE LA HAREMOS COMPATIBLE CON LOS USOS MUSEOGRÁFICOS.
Apoyamos la utilización prioritaria de luz natural aunque existe una tradición de estricto control lumínico en espacios museográficos estos requerimientos de luz difusa se han relajado en espacios industriales rehabilitados para centros de arte joven y urbano. Nuestro edificio se configura en planta para necesitar un mínimo consumo eléctrico para aporte de iluminación al mismo tiempo que trata de controlar la entrada de luz directa sin obstruir las vistas lejanas de las montañas. Para ello las plantas se configuran con una fisionomía de boomerang donde un gran patio central queda envuelto por la crujía edificada. La crujía tiene un ancho variable disminuyendo su fondo edificado en los donde otros edificios producen obstrucción solar (N y S) y aumentando el fondo edificado en la orientación a poniente. En los laterales noroeste y sureste las líneas de borde de los forjados son coincidentes en vertical formando una fachada continua, sin embargo, en el extremo Oeste cada uno de los forjados vuela sobre el inferior. Este recurso de introducir voladizos en la fachada a poniente permite evitar la entrada de sol vespertino que, en climas como el de Medellín resulta desaconsejable por coincidir con un estado atmosférico sobre calentado. Esta obstrucción de la luz natural, al no realizarse con persianas o celosías no implica un ocultamiento de las vistas a las montañas de poniente, tan características de Medellín. El conjunto completo de los forjados nunca supera en anchura los 12 metros y tiene sistemáticamente doble orientación lo cual garantiza un máximo aprovechamiento de las horas de luz natural.
Dado que la ciudad de Medellín tiene un exceso de radiación solar, con un promedio de 158 horas de brillo solar mensual, que puede generar un aumento de la temperatura de confort en espacios cerrados hemos llegado a un compromiso entre funcionalidad y rigor bioclimático proponiendo un edificio eminentemente abierto, con abundante ventilación natural y protecciones solares practicables. Las únicas orientaciones donde los forjados superiores no vuelan sobre los inferiores y donde tampoco hay obstrucción solar generada por edificios son las volcadas al patio. En ellas se disponen toldos textiles que hacen compatible la obstrucción solar con la ventilación abundante. Pese a la enorme transparencia que el edificio presenta y que puede corroborarse en las vistas NUNCA se utilizan fachadas de vidrio estancas a haces de las caras de forjado o, lo que es lo mismo sin protección mediante marquesina o porche, todas las áreas útiles se retranquean respecto a la entrada de luz y evitando el deslumbramiento y el exceso de radiación y permitiendo, sin embargo, la no dependencia funcional de la luz artificial.
Para compatibilizar las necesidades museográficas con esta filosofía de entrada de luz solar indirecta se ha recurrido a un sistema de fachadas abierto y compuesto de varias capas a diferentes distancias del borde de forjado. La primera capa es una superficie discontinua de esferas y semiesferas de materiales vítreos, cerámicos y vegetales con diferentes niveles de opacidad y brillo. Después de esa capa, que se deja atravesar por lluvia y viento, cada planta y uso contemplan diferentes recursos para el control de la iluminación (lamas verticales rotatorias, materiales semitrasparentes coloreados y retranqueados de las fachadas etc.). Esta batería de recursos ofrece un amplio surtido posibilidades museográficas y para la organización de eventos.
GARANTIZAREMOS LA VENTILACIÓN NATURAL ABUNDANTE.
La situación de la Ciudad de Medellín en el diagrama bioclimático de Oligay arroja una conclusión determinante: el recurso más necesario para la consecución pasiva del confort climático es la ventilación natural. Recordemos que estamos edificando en una ciudad con una temperatura media de 22º y una humedad relativa media del 68%. En esas circunstancias la ventilación disminuye la sensación sofocante y de pesadez producida por las temperaturas superiores a veintiocho grados y suaviza la sensación térmica. Mucho más eficaz que el intento de realizar estancias estancas para controlar la presencia de goteras y humedades es la implementación abundante de aire natural en un movimiento continuo y suave. Ese movimiento de aire se garantiza comunicando espacios con diferencias de presión atmosférica: organizando plantas pasantes (aberturas a dos orientaciones opuestas), conectando espacios soleados y sombreados, o vinculando fachadas con diferente exposición al viento. En nuestro edificio los toldos orientados en posición este-oeste en posición inclinada comunican el espacio semienterrado del patio central con la soleada cubierta aumentando el efecto de ventilación cruzada por medio de la succión solar (producido por el movimiento natural ascendente del aire caliente).
HABILITAREMOS UN GRAN PATIO SOMBREADO Y REHUNDIDO.
La planta inferior de nuestro patio se encuentra en una cota semienterrada. Dicha cota permite producir un control de temperaturas de +/-4 siempre en la dirección de confort por utilizar la inercia térmica natural de la tierra. Ese espacio esta arbolado, proporcionando un remanso al ruido urbano, a la contaminación atmosférica y a otras condiciones adversas del medio ambiente de la ciudad. Los toldos que circundan el patio se superponen de plantas superiores a inferiores produciendo láminas continuas de movimiento de aire espontáneo.
CAPTAREMOS ENERGÍA EÓLICA SUFICIENTE PARA EL SISTEMA DE ILUMINACIÓN CON LEDS.
Utilizaremos pequeños aerogeneradores (minieólica) para alimentar los sistemas de leds RGB que se distribuyen en fachada permitiendo la inclusión de piezas interactivas y de programas de difusión.
HEMOS IDEADO UN SISTEMA DE COMUNICACIONES QUE COMPATIBILIZA LA FUNCIONALIDAD DEL GERENTE CON EL MOVIMIENTO INTUITIVO DEL VISITANTE.
Cuando el visitante ingrese en la plaza inferior reconocerá automáticamente la existencia de un núcleo de escaleras mecánicas que le permite “ascender al cielo”. El espacio es sencillo de entender: las escaleras suben, formando una directriz única, del patio a la cubierta. No hay lugar a pérdidas ni dudas sobre si uno puede subir pues el visitante advierte desde abajo la presencia de otros que otean el horizonte desde la cubierta. Otro núcleo situado en una posición contigua a la fachada de Talleres Robledo compacta todos los movimientos verticales de trabajadores, mercancías, comisarios etc. Este segundo núcleo habilita la entrada separada al auditorio que se pedía en las bases, proporciona un acceso más rápido de personas y piezas a la cubierta y posibilidad la accesibilidad integral de los discapacitados. Los itinerarios en cada planta se realizan alrededor de un patio panóptico que permiten contemplar, en todo momento, la posición de las escaleras metálicas.
UN SISTEMA ESTRUCTURAL QUE CONLLEVA MENOS EMISIONES DE CO2. En términos estructurales hemos optado por combinar estructuras de cerchas roblonadas compuestas por pequeños perfiles metálicos entrelazados con algunos mástiles de madera laminada, que aguantan las compresiones de las cerchas, y cables de acero que postesan la estructura y acortan las luces de los forjados en ménsula. Un trabajo fundamental ha sido la reducción de cargas muertas o propias de los materiales de construcción recurriendo a la solución de forjados huecos de listones de madera antes descritos y al uso de materiales extremadamente ligeros en las fachadas consecutivas. Esto permite una disminución considerable de la cantidad del material (consideramos una reducción del 30% respecto al peso de un edificio con forjado de hormigón) y una severa reducción de las emisiones de CO2 (de un 40% aproximadamente). La sustitución de los elementos resistentes del forjado, que habitualmente se ejecutarían en hormigón o acero permite aumentar el número de productos renovables implicados en el proceso constructivo.
LA CONVIVENCIA CON LA REPRESENTACIÓN ESPONTÁNEA DE LA VIDA: HACIA UNA CONSTRUCCIÓN NO RETOCADA.
Diferentes estadísticas dicen que en construcción un 30% del dinero se dedica a acabados: pinturas, falsos techos, enchapados etc. Hemos buscado una forma de ejecución que no implique elegir costosas carpinterías o chapados para asegurar la fortaleza figurativa de la obra. Las internvenciones recientes en espacios reciclados para centros de arte de más éxito internacional (PS1 NY o Palais de Tokyo Paris) han abierto el camino a lo que algunos han llamado, “la convivencia con la ruina”. Esto no implica que destruyamos nuestros edificios, pero si que entendamos que el arte contemporáneo esta más comodo y resulta más natural en el garage que en el salón en el que se toma el té. Nuestra fachada con materiales semiesféricos colgados de cable con simple palometa y deja una zona expuesta a la lluvia. Gastamos el dinero en generar posibilidades de acontecimientos más que en garantizar una catalogación de confort inecesaria.
Esta memoria trata de ser breve y completa, comprensible y técnicamente precisa. Es mucho lo pensado y son grandes los retos que enfrentamos y, sin embargo, breves los tiempos para tomar decisiones. En aras de lograr que la claridad y la concisión no eludan las aspiraciones integrales que perseguimos, hemos dividido esta memoria en tres apartados, tratando de que cada uno de ellos explique la propuesta desde un punto de vista distinto. En cada apartado hemos redactado un pequeño preámbulo al que, después, hemos acompañado de una serie de lemas: frases o párrafos sintéticos que trazan argumentos de desarrollo para la trasformación de estos dibujos en una mágica realidad y para su explicación, a quien pueda interesar.
REFERENCIAS CONCEPTUALES.
¿Por qué hemos construido los planos de una Nube?: Una vez Foucault habló sobre Magritte.
En 1968 Michel Foucault escribió un ensayo sobre René Magritte. El título hacia un homenaje expreso a una emblemática obra del pintor: “Ceci n’est pas une pipe”. Habría que confesar que este ha sido el libro de cabecera, durante unas semanas, del equipo redactor de este proyecto. ¿Por qué?, la respuesta es sencilla: el libro dedica un gran esfuerzo a analizar la inteligibilidad de las piezas de arte contemporáneo y ese era, precisamente, el mayor de nuestros desvelos desde comienzo del trabajo. Podríamos hacer un edificio hermoso, valorado por los arquitectos, un edificio funcional valorado por los gerentes o un edificio significativo valorado por la Alcaldía pero ninguno de estos logros garantizaban el objetivo fundamental: sensibilizar a un número importante de personas, sin predisposición previa, hacia el disfrute y la valoración del arte contemporáneo. ¿Cómo conseguir que los adolescentes tengan ganas de ver arte después de clase?, ¿cómo garantizar que los trabajadores de las industrias que todavía se ubican en barrios colindantes se sientan bienvenidos en la hora del almuerzo?, ¿cómo eludir la percepción elitista y especializada que del arte contemporáneo tiene la ciudadanía?. Secretamente, el libro de Magritte habla de ello.
Foucault defiende que en cualquiera de los vericuetos que empuja a un artista a una creación intervienen dos elementos fundamentales: los objetos y las palabras. Aunque después no queden en el lienzo, la escultura o el video, el artista ha necesitado palabras y objetos para planificar su acción. La abstracción en el arte contemporáneo ha provocado que, prácticamente siempre, esas palabras y esos objetos que alumbraron la creación desaparezcan en el soporte definitivo. Se separan así dos argumentos, que hasta el siglo XX habían tenido siempre una estrecha relación: la interpretación de los hechos, de lo que vemos, de lo que está delante y el relato creativo del mismo, el que describe el proceso de ideación. Esta separación hace que para muchos el arte contemporáneo carezca de sentido, sea hermético o, incluso, roce a veces lo ridículo. Según Foulcault, Magritte propone una nueva alianza entre las desvencijadas hipótesis de la interpretación: acorrala a la cosa con la palabra, lanza dos mensajes paralelos, insiste en los planos de interpretación y en sus relaciones. Pero también obliga al espectador a pensar. Si el caligrama dice lo mismo con la imagen que con la palabra, Magrittte lo deshace e introduce una relación no literal que obliga al espectador a conectar, en su mente, de nuevo, la palabra y la imagen que se le han presentado juntas.
Esta era una de las determinaciones que teníamos en el diseño: nuestro museo pondrá en boca del espectador un nombre, recuperará la palabra y facilitará un encuentro entre signos reconocibles y símbolos coincidentes. Cualquiera que lo vea dirá que es una nube, rechoncha, misteriosa y de aspecto decididamente blando. Verá la nube recortada sobre el cielo, como en cualquier hermoso paisaje, pero sabrá que solo la magia de la creación humana ha permitido generar esta belleza, excepcional, atípica y que parece desafiar lo posible. El edificio proporciona a la institución una imagen accesible, comprensible, significativa, divertida, desenfada y vinculada al ejercicio de la creatividad humana. Todo ello sin detrimento alguno de las prioridades de arquitectos, alcaldes y gerentes, a los que, como explicaremos en otros apartados de la memoria, dejaremos convenientemente satisfechos pero sin olvidar, tampoco, que el gran destinatario de este espacio es un público reacio a comprender su necesidad y su interés.
Nuestros lemas en lo conceptual:
HAY QUE ROMANTIZAR EL MUNDO (lo confesamos, este lo hemos tomado prestado, lo dijo Friedrich von Hardenberg (1772-1801) pero lo que importa es lo que sigue): tenemos que “convertir lo misterioso en cotidiano y lo cotidiano en sublime”.
PARA LA ARQUITECTURA DEL MAMM CONECTE CON LA CIUDADANÍA PAISA DEBEMOS CONSTRUIR LA FIGURACIÓN DE NUESTRO TIEMPO Y DE NUESTRAS INSTITUCIONES: Nuestro edificio no abstracto pretende ser el rostro amigo que permite a todos reconocer a las personas y su tiempo. Se vincula con la publicidad, con los comics, con los osos de peluche, con el videoarte y con lo que sucede en internet.
LA VOCACIÓN CULTURAL Y PÚBLICA EXIGE QUE EL EDIFICIO SEA, ADEMÁS, UN LADRILLO EN LA CONTRUCCIÓN DE IDENTIDAD DE LA CIUDAD. Aunque a los arquitectos puristas les encante criticar la arquitectura icónica y intenten achacarle millones de pecados lo cierto es que el Museo Guggemhein colocó a Bilbao en los planos del mundo y que ese beneficio es un enorme rédito social a largo plazo.
EL ARTE ES SIMPLEMENTE, VER EL MUNDO CON OTROS OJOS. Esto lo suscribe John Berger y lo aplica nuestro edificio planteando al espectador imágenes del exterior, de lo que conoce como cotidiano, deformado por lupas y teñido por colores.
UTILIZAMOS EL MITO DE LA ESCALERA HACIA EL CIELO PROCEDENTE DE VARIAS COSMOLOGÍAS INDÍGENAS DE LATINOAMÉRICA. Varias cosmologías y tradiciones culturales indígenas latinoamericanas utilizan la leyenda de la escalera al cielo para explicar los procesos de creación. En Perú se han encontrado leyendas con este argumento que explican la separación de la luna y el sol, antes una feliz pareja habitante de la tierra, como fruto de un castigo supremo consistente en hacer subir al varón al cielo por una escalera.
UNA NUBE SOBRE TALLERES ROBLEDO. Siguiendo la tradición cultural del Realismo Mágico que ha proporcionado tan insignes obras en Colombia proponemos al espectador una estampa no exenta de surrealismo: una nube parece haberse quedado obstinadamente enganchada al edificio de talleres robledo.
CONVERTIMOS EL CLIMA EN UN ARGUMENTO CULTURAL. Desde Heideger, muchos movimientos culturales han reivindicado la puesta en valor de las condiciones geográficas como aspecto configuradores de la cultura. Este proyecto trata de distinguir las condiciones geográficas de Medellín como el clima, como episodios de naturaleza cultural.
REFERENCIAS MUSEOGRÁFICAS.
Como captar al público no natural.
Si preguntásemos a cualquiera quienes son los destinatarios de un museo público parecería evidente la respuesta: toda la ciudadanía. Las estadísticas, aunque todos sabemos que puedan servir para apoyar casi cualquier argumento, no refrendan completamente esta suposición. Sin entrar en situaciones coyunturales más específicas debemos recordar que, los museos del Reino Unido, país cuya capital cuenta con una da las ofertas de museos más extensa y cualificada del mundo, reciben 110 millones de visitantes anuales y que, sin embargo, solo un 4% de la población local visita los museos, a pesar de los enormes despliegues de exposiciones temporales, más de 5 veces al año (Merriman, 2004). También hay un 20% de británicos que nunca en su vida visita un museo. Si las estadísticas que hubiésemos manejado se refiriesen específicamente a Museos de Arte Contemporáneo, los números serían más dramáticos en evidencias de cantidad y de especialización. Si no contamos con la exhuberancia museística de la ciudad de Londres y si no tenemos una cimentada afluencia turística, vuelven a reducirse significativamente las cifras.
En el mismo ámbito geográfico del Reino Unido, en el que hay muchos ejemplos de monitorización institucional, los estudios cualitativos, aquellos que tienen en cuenta la identidad del visitante, arrojan predecibles resultados: los visitantes más probables de un museo son el colectivo con mayor preparación académica (doctores y titulados universitarios) y el más desocupado (jubilados y parados), (Merriman, 2004). Aunque la tendencia es a la popularización espontánea en casi todos los países, el caso particular del arte contemporáneo sigue siendo un escollo cuya magnitud puede medirse por la drástica segmentación de clases sociales que reciben las Galerias de Arte (Schulter, 2005). Así pues si queremos que la afirmación de que los Museos públicos son para todo el mundo sea cierta tenemos mucho trabajo por hacer. La identidad arquitectónica y las posibilidades museográficas van a influir de forma determinante en las aspiraciones de la institución. El Museo Guggeheim de Bilbao ha recibido 10 millones de visitas en 10 años, número de visitantes que, antes de construirse, no era siquiera alcanzado por la cantidad de viajeros que se acercaba a una ciudad aquejada de un pasado industrial en decadencia. Exposiciones como “Bodies. El cuerpo humano como nunca lo has visto” vatió records de afluencia consiguiendo 500 visitantes en las dos primeras horas en muchas ciudades y una media de 6.000 visitantes/mes en diferentes emplazamientos. Aunque pensemos que estos logros requieren costosas inversiones esas inversiones se han hecho en otros muchos lugares sin un éxito equiparable. ¿Qué distingue a las intervenciones que superan significativamente el número de visitantes predecibles?, ¿Cómo se consigue que una exposición forme parte de los temas de conversación en trabajos y colegios?. Nuestra propuesta de edificio y filosofía museográfica aprenden las claves que las iniciativas museográficas recientes nos han proporcionado.
Una de estas claves es, sin duda, la singularización y la intensificación de la experiencia. La competencia de otros soportes, no solo los libros y revistas que ya existían, si no internet, los documentales cinematográficos, o los soportes digitales en DVD hacen que la inversión de tiempo y esfuerzo que supone la visita al museo tenga que compensarse con una experiencia “única”, que no podría reproducirse en casa o a través del ordenador. Para muchas instituciones clásicas la singularidad y la intensidad de la experiencia se apoyan en la calidad ambiental y en la presencia de las obras. El Velázquez que retrata a Inocencio X o los autorretratos de Rembrandt acompañados de la luz adecuada y un edificio histórico son sinónimo de estremecimiento asegurado. Cuando no hay un conocimiento previo de las obras, ni esa anticipación casi mítica, construir la singularidad de la experiencia e intensificar lo que su contemplación en otros medios puede suponer es un reto mucho más complejo. Otra clave fundamental es la huida de la presunción académica que envolvía a los museos del XIX y el acercamiento a realidades más integradas y comprensibles en la realidad urbana. Las medidas concretas tomadas por el equipo redactor de esta propuesta para alcanzar esos objetivos se listan a continuación, como anunciamos, en forma de lema.
UNA ARQUITECTURA ÚNICA. Creemos que Medellín merece un edificio único, que signifique y represente a la ciudad internacionalmente. Creemos que las particularidades climáticas de Medellín son diferentes a las europeas y a las norteamericanas y que la realización de edificios bunker, completamente cerrados a las favorables condiciones ambientales proceden de una aplicación acrítica de tendencias excesivamente globalizadoras. Recordamos que según los analistas “los museos tienen un papel fundamental en mejorar la comprensión de la identidad y el sentido de pertenencia a un lugar a una comunidad. Ante las duras condiciones de cambio y coyuntura socio políticas de muchos países, los museos han producido vínculos eficaces entre el pasado y el presente y han tenido un rol activador para la construcción de prometedores futuros”. (Ambrose y Paine, 1993).
TRABAJAREMOS SOBRE TODO PARA EL PÚBLICO. Sin violar los principios de la funcionalidad museográfica y de la calidad arquitectónica el objetivo que capitanea nuestro trabajo es conseguir la mayor popularidad del edificio en el público no especializado.
CON ESPECIAL ATENCIÓN A LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES. La distribución de tiempos y ocupaciones de los sectores más jóvenes de la población les convierte en candidatos adecuados a ser público de museo. La incorporación de los jóvenes garantiza un patrimonio cultural futuro, especialmente deseable para las ciudades. En muchos lugares del mundo no se consigue esa incorporación eficazmente porque los espacios museográficos tradicionales requerían de silencios y ceremonias incompatibles con la naturaleza infantil y preadolescente e difícilmente compatibles con los grupos adolescentes no monitorizados (lo que intentamos capturar son visitas espontáneas). Hemos planteado un museo muy transparente y accesible desde varios espacios públicos para que el ruido producido por los niños no impida la contemplación interior y más pausada de las obras pero tampoco evite su acercamiento. Hemos construido una nube mágica, un espacio sorprendente que incita a la exploración sensorial. Hemos incorporado las nuevas tecnologías, recurso en el que los sectores más jóvenes de la población se sienten legitimados a capitanear destrezas instrumentales e interpretativas.
PROPORCIONAMOS UNA PLATAFORMA ABIERTA PARA COMISARIOS, GERENTES Y ARTISTAS.
Nuestro edificio se compone de varios forjados horizontales de gran extensión. La estructura se ubica buscando una máxima diafaneidad del espacio. No existe una fachada única, sino un conjunto de soluciones, dispuestas en varios planos que permiten personalizar la entrada de luz, olores y ruidos a cada espacio. Esta estructura debe ser entendida como una gran plataforma, donde puede alojarse cualquier actividad. La solución técnica para los forjados consiste en la realización de cajas huecas cerradas con listones de madera en bruto con espacios huecos intercalados entre listones. Esta solución posibilita la canalización de instalaciones especiales a cualquier punto del museo sin obra húmeda y permite al comisario o artista modificar sustancialmente el espacio. Así pues proponemos un sistema de plataformas abiertas y horizontales que pueden tener diversos usos expositivos o participativos. Más que proponer un esquema típico de compartimientos o salas conectadas, proponemos suelos flexibles y conectados verticalmente que pueden dar cabida a diversos tipos de eventos en torno a la cultura: lanzamientos de libros, debates temáticos, exposición de obras de arte plástico, intervenciones, performances, fiestas musicales, etc...
UNA DE LAS PRIORIDADES DEL DISEÑO HA SIDO CONTRUIR ESPACIOS PÚBLICOS ASOCIADOS AL USO DEL EDIFICIO. En análisis de las condiciones y retos urbanísticos de la ciudad de Medellín arroja un resultado inmediato: el trabajo más urgente a realizar por la alcaldía es la mejoría de la movilidad peatonal. La ciudad presenta un déficit de espacios públicos habitables con un acceso democrático para el conjunto de la población. Es mucho lo que se ha hecho en los último años y grandes los éxitos alcanzados que pueden medirse en la popularidad de espacios como la Plaza de los Deseos o el Parque Lineal con el que estableceremos vecindad. Parece incluso que una de las fórmulas probadas de éxito para la arquitectura y el urbanismo de Medellín consiste en la asociación de cada edificio de calidad a un espacio público anexo. Reconociendo el buen criterio de esta política hemos querido prolongarla e intensificarla. Por ese motivo hemos planteado una ocupación de parcela del 42% y hemos habilitado en el 58% de superficie restante una gran plaza, con la que el edificio establece un diálogo interactivo. Además hemos dispuesto una gran cubierta museo, donde el arte se enfrenta al paisaje de las montañas de poniente y donde se pueden realizar eventos con un aforo de unas 500 personas. Por otro lado hemos ubicado un patio cubierto de árboles y semihundido, protegido del exceso de humedad y dentro de las zonas de acceso sin pago de entrada para convertirnos en un destino habitual a las horas del almuerzo, el desayuno o la merienda, captando, de nuevo, un público espontáneo e imprevisto.
LOS ESPACIOS Y RECORRIDOS MUSEOGRÁFICOS QUE SE ORGANIZAN NO SON TANTO SALAS COMO ITINERARIOS ENTRE PLATAFORMAS. La forma de boomerang de las plantas, la ubicación central de las escaleras mecánicas y la disposición de deambulatorios perimetrales generará un catálogo de espacios expositivos donde el criterio de ordenación prioritario sea el de recorrido frente al de sala. Este esquema de funcionamiento museográfico ha dado lugar a espacios muy reconocibles como el museo Guggenheim de Nueva York o el museo Judio de Berlín. Pero, fuera de que la envolvente arquitectónica rigidice o faculte el movimiento, es una de las políticas imperantes en los museos que puede constatarse en las grandes pinacotecas como el Louvre o en prestigiosos Museos de la Ciencia en todo el mundo.
POR FAVOR, DESOIGAN A LOS ACADEMICISTAS. Por todo ello les pedimos que, por favor, desoigan a los academicistas. Conocemos la tradición que dice que las paredes de los museos son blancas, para dar libertad y contraste a lo que se expone, que la luz artificial es más controlable que la natural, que el racionalismo no solo es más barato sino que es más funcional y que la arquitectura de calidad no es compatible con la metáfora. Llamamos a los representantes institucionales y públicos a reflexionar sobre si quieren destinar su inversión a carpinterías que desaparecen para generar una sensación de arquitectura limpia sabiendo que esa apariencia de racionalismo es más costosa de lo que perece, a que el arquitecto pueda dar lecciones sobre la inteligencia de la modulación en planta o a que, de verdad, consigamos hacer, entre todos, una institución formativa y que genere entusiasmo social. Todo ello no es incompatible con las últimas tendencias museográficas, que gustan más de un garage lleno de objetos inservibles que de una caja blanca con aspecto de cenotafio. Para dar muestra de ello hemos seleccionado algunos ejemplos.
DESCRIPCIONES FUNCIONALES FUNDAMENTALES.
Una parte fundamental e irrenunciable de la cultura de nuestra época, que implica un cambio de paradigma en el pensamiento contemporáneo es la cultura de la sostenibilidad. Este proyecto no trata solo de adaptar arquitecturas de otras épocas incorporando medidas paliativas si no que contempla la sostenibilidad como uno de sus principios fundacionales. Aunque la definición de sostenibilidad excede a los requerimientos de las técnicas bioclimáticas, estas técnicas pueden definirse como un compromiso básico de los edificios con su medio ambiente. Estas son algunas de las aplicaciones que la técnicas bioclimáticas han tenido en el edificio.
USAREMOS LUZ NATURAL SIEMPRE QUE SEA POSIBLE, AUNQUE LA HAREMOS COMPATIBLE CON LOS USOS MUSEOGRÁFICOS.
Apoyamos la utilización prioritaria de luz natural aunque existe una tradición de estricto control lumínico en espacios museográficos estos requerimientos de luz difusa se han relajado en espacios industriales rehabilitados para centros de arte joven y urbano. Nuestro edificio se configura en planta para necesitar un mínimo consumo eléctrico para aporte de iluminación al mismo tiempo que trata de controlar la entrada de luz directa sin obstruir las vistas lejanas de las montañas. Para ello las plantas se configuran con una fisionomía de boomerang donde un gran patio central queda envuelto por la crujía edificada. La crujía tiene un ancho variable disminuyendo su fondo edificado en los donde otros edificios producen obstrucción solar (N y S) y aumentando el fondo edificado en la orientación a poniente. En los laterales noroeste y sureste las líneas de borde de los forjados son coincidentes en vertical formando una fachada continua, sin embargo, en el extremo Oeste cada uno de los forjados vuela sobre el inferior. Este recurso de introducir voladizos en la fachada a poniente permite evitar la entrada de sol vespertino que, en climas como el de Medellín resulta desaconsejable por coincidir con un estado atmosférico sobre calentado. Esta obstrucción de la luz natural, al no realizarse con persianas o celosías no implica un ocultamiento de las vistas a las montañas de poniente, tan características de Medellín. El conjunto completo de los forjados nunca supera en anchura los 12 metros y tiene sistemáticamente doble orientación lo cual garantiza un máximo aprovechamiento de las horas de luz natural.
Dado que la ciudad de Medellín tiene un exceso de radiación solar, con un promedio de 158 horas de brillo solar mensual, que puede generar un aumento de la temperatura de confort en espacios cerrados hemos llegado a un compromiso entre funcionalidad y rigor bioclimático proponiendo un edificio eminentemente abierto, con abundante ventilación natural y protecciones solares practicables. Las únicas orientaciones donde los forjados superiores no vuelan sobre los inferiores y donde tampoco hay obstrucción solar generada por edificios son las volcadas al patio. En ellas se disponen toldos textiles que hacen compatible la obstrucción solar con la ventilación abundante. Pese a la enorme transparencia que el edificio presenta y que puede corroborarse en las vistas NUNCA se utilizan fachadas de vidrio estancas a haces de las caras de forjado o, lo que es lo mismo sin protección mediante marquesina o porche, todas las áreas útiles se retranquean respecto a la entrada de luz y evitando el deslumbramiento y el exceso de radiación y permitiendo, sin embargo, la no dependencia funcional de la luz artificial.
Para compatibilizar las necesidades museográficas con esta filosofía de entrada de luz solar indirecta se ha recurrido a un sistema de fachadas abierto y compuesto de varias capas a diferentes distancias del borde de forjado. La primera capa es una superficie discontinua de esferas y semiesferas de materiales vítreos, cerámicos y vegetales con diferentes niveles de opacidad y brillo. Después de esa capa, que se deja atravesar por lluvia y viento, cada planta y uso contemplan diferentes recursos para el control de la iluminación (lamas verticales rotatorias, materiales semitrasparentes coloreados y retranqueados de las fachadas etc.). Esta batería de recursos ofrece un amplio surtido posibilidades museográficas y para la organización de eventos.
GARANTIZAREMOS LA VENTILACIÓN NATURAL ABUNDANTE.
La situación de la Ciudad de Medellín en el diagrama bioclimático de Oligay arroja una conclusión determinante: el recurso más necesario para la consecución pasiva del confort climático es la ventilación natural. Recordemos que estamos edificando en una ciudad con una temperatura media de 22º y una humedad relativa media del 68%. En esas circunstancias la ventilación disminuye la sensación sofocante y de pesadez producida por las temperaturas superiores a veintiocho grados y suaviza la sensación térmica. Mucho más eficaz que el intento de realizar estancias estancas para controlar la presencia de goteras y humedades es la implementación abundante de aire natural en un movimiento continuo y suave. Ese movimiento de aire se garantiza comunicando espacios con diferencias de presión atmosférica: organizando plantas pasantes (aberturas a dos orientaciones opuestas), conectando espacios soleados y sombreados, o vinculando fachadas con diferente exposición al viento. En nuestro edificio los toldos orientados en posición este-oeste en posición inclinada comunican el espacio semienterrado del patio central con la soleada cubierta aumentando el efecto de ventilación cruzada por medio de la succión solar (producido por el movimiento natural ascendente del aire caliente).
HABILITAREMOS UN GRAN PATIO SOMBREADO Y REHUNDIDO.
La planta inferior de nuestro patio se encuentra en una cota semienterrada. Dicha cota permite producir un control de temperaturas de +/-4 siempre en la dirección de confort por utilizar la inercia térmica natural de la tierra. Ese espacio esta arbolado, proporcionando un remanso al ruido urbano, a la contaminación atmosférica y a otras condiciones adversas del medio ambiente de la ciudad. Los toldos que circundan el patio se superponen de plantas superiores a inferiores produciendo láminas continuas de movimiento de aire espontáneo.
CAPTAREMOS ENERGÍA EÓLICA SUFICIENTE PARA EL SISTEMA DE ILUMINACIÓN CON LEDS.
Utilizaremos pequeños aerogeneradores (minieólica) para alimentar los sistemas de leds RGB que se distribuyen en fachada permitiendo la inclusión de piezas interactivas y de programas de difusión.
HEMOS IDEADO UN SISTEMA DE COMUNICACIONES QUE COMPATIBILIZA LA FUNCIONALIDAD DEL GERENTE CON EL MOVIMIENTO INTUITIVO DEL VISITANTE.
Cuando el visitante ingrese en la plaza inferior reconocerá automáticamente la existencia de un núcleo de escaleras mecánicas que le permite “ascender al cielo”. El espacio es sencillo de entender: las escaleras suben, formando una directriz única, del patio a la cubierta. No hay lugar a pérdidas ni dudas sobre si uno puede subir pues el visitante advierte desde abajo la presencia de otros que otean el horizonte desde la cubierta. Otro núcleo situado en una posición contigua a la fachada de Talleres Robledo compacta todos los movimientos verticales de trabajadores, mercancías, comisarios etc. Este segundo núcleo habilita la entrada separada al auditorio que se pedía en las bases, proporciona un acceso más rápido de personas y piezas a la cubierta y posibilidad la accesibilidad integral de los discapacitados. Los itinerarios en cada planta se realizan alrededor de un patio panóptico que permiten contemplar, en todo momento, la posición de las escaleras metálicas.
UN SISTEMA ESTRUCTURAL QUE CONLLEVA MENOS EMISIONES DE CO2. En términos estructurales hemos optado por combinar estructuras de cerchas roblonadas compuestas por pequeños perfiles metálicos entrelazados con algunos mástiles de madera laminada, que aguantan las compresiones de las cerchas, y cables de acero que postesan la estructura y acortan las luces de los forjados en ménsula. Un trabajo fundamental ha sido la reducción de cargas muertas o propias de los materiales de construcción recurriendo a la solución de forjados huecos de listones de madera antes descritos y al uso de materiales extremadamente ligeros en las fachadas consecutivas. Esto permite una disminución considerable de la cantidad del material (consideramos una reducción del 30% respecto al peso de un edificio con forjado de hormigón) y una severa reducción de las emisiones de CO2 (de un 40% aproximadamente). La sustitución de los elementos resistentes del forjado, que habitualmente se ejecutarían en hormigón o acero permite aumentar el número de productos renovables implicados en el proceso constructivo.
LA CONVIVENCIA CON LA REPRESENTACIÓN ESPONTÁNEA DE LA VIDA: HACIA UNA CONSTRUCCIÓN NO RETOCADA.
Diferentes estadísticas dicen que en construcción un 30% del dinero se dedica a acabados: pinturas, falsos techos, enchapados etc. Hemos buscado una forma de ejecución que no implique elegir costosas carpinterías o chapados para asegurar la fortaleza figurativa de la obra. Las internvenciones recientes en espacios reciclados para centros de arte de más éxito internacional (PS1 NY o Palais de Tokyo Paris) han abierto el camino a lo que algunos han llamado, “la convivencia con la ruina”. Esto no implica que destruyamos nuestros edificios, pero si que entendamos que el arte contemporáneo esta más comodo y resulta más natural en el garage que en el salón en el que se toma el té. Nuestra fachada con materiales semiesféricos colgados de cable con simple palometa y deja una zona expuesta a la lluvia. Gastamos el dinero en generar posibilidades de acontecimientos más que en garantizar una catalogación de confort inecesaria.
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